Un modelo de máxima eficiencia. optimización de costes y de m2 construidos, creando una solución de ejecución rápida, con un programa a medida, resultando en un edificio con larga vida útil.

Un hospital convencional tarda alrededor de 3 años de obra para obtener el producto final. El hospital paramétrico trabaja el proyecto y la obra solapados en medio año, entregando el producto final en 1 año. 2 años antes que un hospital convencional.

El hospital paramétrico cuenta con iluminación y ventilación natural.

Se utiliza el ancho paramétrico para construir un hospital pabelloriano.
Los pabellones se separan entre sí para darle máxima luz y ventilación a todos los espacios.

La circulación interior es organizada:
Se conectan los pabellones mediante dos pasillos generales, uno público (familiares y pacientes ambulatorios) y otro técnico (personal, pacientes hospitalizados, logistica y suministros).

Cuenta con pabellones decalados:
Se desplazan los pabellones centrales para dotar de una iluminación más homogénea a los pasillos principales.

Organización de servicios hospitalarios:
De esta manera el hospital se dividirá entre servicios con acceso exclusivo tecnico, acceso público y accesos públicos técnicos.

Ampliabilidad:
Se genera así un hospital funcional con una gran calidad de espacios y con una forma que se adapta al tamaño y las necesidades particulares de cada caso.

Una estructura organizada y repetida:
Por otra parte, el hospital se organiza mediante pabellones con el mismo acto y con crujías iguales.